En mayo vuelven a aumentar los combustibles

Corresponderá a la cuarta etapa de la actualización de los impuestos al combustible líquido (ICL) y al dióxido de carbono (IDC). En los últimos meses las naftas subieron más del 105 por ciento

La suba de los combustibles se ha vuelto una tendencia predominante en los últimos y mayo no será la excepción. En ese sentido, el Gobierno iniciará el mes próximo con un nuevo incremento en los surtidoresque partirá de un piso del 4% pero que, según la zona del país, podría saltar por encima del 6%, de acuerdo a estimaciones de distintas cámaras del expendio.

El aumento que viene corresponderá a la cuarta etapa de la actualización de los impuestos al combustible líquido (ICL) y al dióxido de carbono (IDC) dispuesta por el oficialismo con el fin de acentuar la recaudación y, en simultáneo, acercar el precio del combustible argentino a los valores internacionales.

El Gobierno aplicó un ajuste del 4,3% a principios de este mes, mientras que la suba que viene se encuentra programada para la jornada del 1° de mayo, según informó Iprofesional. 

El último incremento promovido a principios de abril llevó el precio de la nafta súper a un estimado de $735.80 el litro en la ciudad de Esquel. Por su parte, la Infinia quedó en $912.80, Ultra en $955.80 y la Infinia Diesel en $1179.

Vale señalar que, previo al arribo del nuevo Gobierno Nacional, la nafta cotizaba a razón de los $404 el litro. De acuerdo a datos de entidades de la comercialización con operaciones en el centro y el este del país, en lo que va de la gestión de La Libertad Avanza (LLA), los combustibles presentan un aumento acumulado del orden del 105 por ciento.

Las causas que explican la suba

Los incrementos que vienen exhibiendo las naftas responden, en gran medida, a la decisión del oficialismo de reinstalar el pago de determinados impuestos a las petroleras.

Al respecto, vale decir que el impuesto a los combustibles fue creado por ley en 1998 y durante la gestión de Mauricio Macri se dispuso su actualización en forma trimestral, ajustado por la inflación oficial, aunque en 2019 se postergó.

Desde julio de 2021 quedó congelado bajo la gestión de Alberto Fernández, hasta que la gestión de Javier Milei lo volvió a actualizar en marzo pasado.