El subsecretario de Asuntos Municipales, Rubén Santillán, aseguró que con las tareas de contención y desagote que se llevaron adelante en Adolfo Van Praet entre este miércoles y jueves, la situación está “prácticamente controlada”, aunque remarcó que «es uno de los pueblos más complicados que tenemos en la provincia».
Desde hace días, Van Praet está rodeada de agua producto del ingreso de una gran masa proveniente desde Córdoba, que desbordó los canales de desagote previstos.
Frente a esta situación personal de Vialidad Provincial, Recursos Hídricos y la Administración Provincial del Agua llegó al lugar y construyó un anillo de protección al casco urbano, profundizó los canales y colocó alcantarillas para que el agua escurra en dirección al declive natural del terreno.
El Ingeniero Jefe de Vialidad Provincial, Rodrigo Cadenas, explicó que este jueves “se colocaron otras cuatro alcantarillas, tres en el camino de acceso al pueblo y una paralela a las vías del ferrocarril con el objetivo de que el agua escurra más rápido y no ingrese en el casco urbano”.
Por su parte, Santillán destacó “la colaboración de los vecinos”, quienes aunaron esfuerzos para desarrollar las tareas necesarias como por ejemplo el llenado de bolsas con tierra y su reparto por distintos lugares del pueblo para evitar que el agua avance.
“Podríamos decir que la situación está prácticamente controlada, aunque es uno de los pueblos más complicados que tenemos en la provincia», aseguró Santillán.
«Necesitaríamos una ayuda del tiempo, uno días sin lluvia, eso nos aliviaría bastante”, resumió el responsable de coordinar las acciones.
Por último remarcó que «la inacción del Gobierno Nacional sobre rutas nacionales que pasan por la Provincia generan más complicaciones para los pueblos de la zona, toda vez que el desvío del tránsito que ocasionan nos está destruyendo los caminos provinciales”.