La joven Nadia Lucero, salvajemente atacada el 15 de diciembre pasado por su expareja, Laureano González, manifestó hoy que se encuentra bien, y agradeció a los médicos, enfermeros y a toda la gente que trabaja en el Lucio Molas.
Le dieron el alta el 6 de febrero, hace una semana y ahora la familia lanzó una rifa para que se pueda construir una pieza donde viva con sus hijos.
Nadia Lucero estuvo al borde de la muerte luego de que González la torturara, golpeara y hasta la cortara. Permaneció internada desde las primeras horas del 16 de diciembre hasta el 6 de febrero. Tuvo una recuperación admirable y hoy se encuentra externada, viviendo en la casa de su padre.
Respecto del día del alta, Nadia manifestó sorpresa: “había mucha gente, algunos los conocía y muchos no”.
La joven agradeció a «los doctores, a los enfermeros, hasta las personas que limpian, todo el mundo se portó re bien conmigo”, expresó.
Esta tarde, la familia de Nadia Lucero lanzó una rifa de 1.000 números a 100 pesos cada una para construir una pieza para la joven y sus hijos.
“Cuando tenía la traqueo me daba miedo hablar, ahora puedo hablar bien”, contó Nadia Lucero a Víctor Salcedo.
Nadia habló también de sus hijos, con quienes volvió a convivir hacer una semana tras casi dos meses de internación, y expresó: «Hoy me hicieron renegar un montón. Hoy los reté, el más grande está mañoso”, dijo.
La joven santarroseña fue salvajemente agredida por su pareja el 15 de diciembre pasado. Laureano González la golpeó, la hirió y en estado de inconsciencia, la dejó en el Hospital Lucio Molas. Luego se dio a la fuga y permaneció prófugo por más de 48 horas.
Lo atraparon el 17 de diciembre por la tarde en una vivienda del Barrio Santa María de Las Pampas. En el lugar detuvieron a los propietarios como encubridores, Claudio Reyna y su pareja.
A los 3 les dictaron prisión preventiva por 90 días. La mujer es la única que la cumple en su domicilio.
A González lo formalizaron por femicidio en grado de tentativa, agravado por el vínculo, con alevosía y por violencia de género.
Fuente Plan B