El gobierno de Mauricio Macri finaliza su mandato con un 40.8 por ciento de pobres, de los cuales un 8.9 por ciento son indigentes.
Según el informe de la UCA, se estima que al tercer trimestre de este año el 32,1% de los hogares y un 40,8% de las personas se encuentran afectados por la pobreza.
Estos índices implican que 16 millones de argentinos viven en la pobreza y 3,6 millones en la indigencia.
La cifra resulta más alarmante si se tiene en cuenta que el 59,5% de los niños y adolescentes están comprendidos en la pobreza, con lo que son unos 7 millones de hogares de este grupo etario castigados.
Los niveles de inseguridad alimentaria severa registrados por la UCA también aumentaron: pasaron del 7,9% en el 2018 a 9,3% este año.
Estos datos se sustentan en las mediciones de pobreza por ingreso aunque también se midió en base a datos multidimensionales como la alimentación, salud, servicios básicos, vivienda digna y educación, entre otros.