
Los docentes acusados por los abusos sexuales en el jardín de 25 de Mayo fueron condenados este miércoles por tres casos, y absueltos en otros tres por el beneficio de la duda. El Tribunal de Audiencia leyó la sentencia después del mediodía, en medio de un fuerte operativo de seguridad y una manifestación de los familiares de los nenes.
El profesor Marcelo Tatavitto fue condenado a 18 años de prisión por abusos sexuales gravemente ultrajante de los tres niños. Oscar Aníbal López fue condenado a 7 años como autor del mismo delito, en un caso.
Las docentes jardineras fueron condenadas también: María Angélica Bastías a 7 años de prisión por su participación en el abuso de uno de los niños, y María José Tello, a 3 años y 6 meses de prisión y 7 de inhabilitación para ejercer, en su caso por el delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público por uno de los niños abusados.
Los imputados no presenciaron la sentencia. También prefirió no estar el abogado defensor de Tatavitto y las dos maestras jardineras.
En cambio, escucharon el veredicto los padres de las víctimas, los abogados querellantes Armando Agüero y Vanesa Ranocchia, el fiscal de General Acha, Juan Bautista Mendez, y el abogado defensor de López, Cesar Augusto Rodríguez.
El querellante, Armando Agüero, adelantó que apelarán las tres absoluciones y buscarán más elementos para despejar las dudas y obtener una sentencia condenatoria. Intentó calmar fuera del edificio el dolor de los padres de los tres nenes en cuyos casos no hubo condena.
“Se comprobó que ustedes no mintieron. Esto pasó. No era mentira, sus hijos y ustedes no mintieron. Pueden volver a 25 de Mayo con la frente alta”, intentó consolarlos.
La fundamentación del fallo se apoya en la credibilidad de los relatos de las víctimas que declararon en cámara Gesell, rechazando eventuales fabulaciones o influencias de terceras personas.
También en los exámenes médicos que comprobaron las lesiones compatibles con situaciones de abusos. Prestaron atención al relato de una testigo de identidad reservada que, una tarde, vio a Tatavitto ingresar con cuatro o cinco chicos al edificio del JIN y que un familiar de Tello le dijo que venían de regar en la chacra.
El caso explotó en mayo del 2015, cuando los padres comenzaron a denunciar abusos en el jardín de infantes de 25 de Mayo. Desde un primer momento, quedó detenido como principal imputado el profesor Tatavitto, un docente que cumplía tareas administrativas en el mismo edificio en el cual funciona el jardín. También fueron detenidas las dos docentes de la salita por su presunta complicidad.
Con el avance de las pesquisas, se sumó una cuarta detención, la de López, que primero había sido separado de su cargo de director de un secundario -se sospecha que intentó borrar pruebas- y luego quedó imputado también porque fue mencionado en las declaraciones en Cámara Gesell.
Fuente y fotos El Diario