El precandidato a Senador Nacional, por Juntos Por El Cambio, Daniel Kroneberger, señaló que “el Gobierno Nacional le vive poniendo el pie encima al campo argentino”.
Con la aplicación del cepo a las exportaciones de carne, se registran caídas en la faena, la producción, el consumo y las exportaciones. Los precios al consumidor no bajan. El relevamiento del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA) reflejó que los precios de los distintos cortes al consumidor en el mercado interno registraron en comparación interanual incrementos de un 77,7%.
“La decisión de cerrar exportaciones, atrasa. No podemos cerrar mercados, no nos podemos dar el lujo de perder dólares por el cierre de exportaciones. El valor de la carne no bajó, se frenó la producción, se frenaron los rodeos.Quedó en evidencia en pocos meses, las consecuencias negativas de la suspensión de las exportaciones de carne.
“Los costos son enormes, y debemos brindar como país, un escenario previsible, con reglas claras de juego, para las inversiones presentes y futuras. Argentina debe cumplir con los compromisos asumidos frente a los mercados internacionales. Es la única manera de generar confianza para nuestros inversores.”
“Informes de las entidades del agro, señalan un aumento del precio de la carne al consumidor del 18 por ciento en promedio entre marzo y junio, mientras que la inflación para los alimentos en ese lapso fue del 11 por ciento. Respecto al valor de las exportaciones el informe remarca que los embarques en junio cayeron 45 por ciento y que ingresaron 108 millones de dólares menos que en mayo”
Señala el informe, que después de 135 días de políticas de esta índole, la cadena de ganados y carnes acumuló pérdidas por USD 1.084 millones, desde el pasado 15 de abril hasta la fecha, por una serie de medidas y resoluciones para intervenir dicho mercado. Es decir que por cada día el sector perdió USD 8 millones.
De acuerdo con la entidad, los productores asumieron el monto más grande de pérdidas con USD 411 millones, mientras que en los frigoríficos las mismas alcanzaron los USD 165 millones y los operarios tuvieron una merma en sus remuneraciones de USD 59 millones. Por caída del efecto multiplicador de la actividad primaria se perdieron USD 209 millones y USD 240 millones exportaciones no realizadas.
«La decisión de extender las trabas a las exportaciones de carne es perjudicar el trabajo y la economía de todos los argentinos«, expresó Kroneberger.
«Con estas decisiones del gobierno nacional, pierden todos los argentinos: consumidores, frigoríficos, trabajadores y productores. Y el Estado. Los únicos que celebran son los competidores de la región. Según el informe, a mediados de abril el productor argentino recibía por su novillo el mismo precio que su par uruguayo, hoy es un 20 por ciento menor. Mientras tanto, el precio de la hacienda en pie en Brasil experimentó un aumento desde mediados de abril del 29 por ciento», remarcó.
«Por el cepo a las exportaciones de carne que impuso el Gobierno, Uruguay volvió a superar a la Argentina en volumen de carne exportada en el mes de julio luego de 3 años, según demostró Fundación Mediterránea.
El país vecino envió al exterior el mes pasado 37.939 toneladas, según datos del Instituto Nacional de Carnes (INAC) de aquel país, lo que generó divisas por 218 millones de dólares. Mientras que la Argentina alcanzó unas 35.611 toneladas, según los números del Indec, por un valor de 191 millones de dólares», indicó.
«No hay dudas que es una medida que va en contra del desarrollo y el crecimiento de la ganadería. No es una medida efectiva para bajar el precio de la carne. Eso ya quedó demostrado a lo largo del tiempo. Estas decisiones nunca acrecentaron la oferta para consumo local y así bajar los precios. Sino que redujeron la producción ganadera», cerró Kroneberger.