El Senado de la Nación expulsó hoy al senador entrerriano Edgardo Kueider, detenido en Paraguay por llevar más 200.000 dólares en efectivo sin declarar y por quien pesa un pedido de detención por parte de la Justicia argentina en otra causa por enriquecimiento ilícito.
Kueider fue removido del cargo por 60 votos afirmativos, seis negativos y una abstención, superando ampliamente los dos tercios necesarios.
Los votos negativos los aportaron cuatro senadores del PRO y un radical: Alfredo De Angeli (Entre Ríos); Carmen Álvarez Rivero (Córdoba); Andrea Cristina (Chubut) y Martín Goerling Lara. Los restantes lo aportaron el correligionario Maximiliano Abad (Buenos Aires) y Carlos Camau Espínola (Corrientes). La abstención, por su parte, la aportó Juan C. Romero (Salta).
El ingreso de la solicitud de quitarle los fueros a Kueider por parte de la jueza Sandra Arroyo Salgado minutos antes del inicio de la sesión, que arrancó pasadas las 11:20, pateó el tablero político de la Cámara alta y envalentonó a senadores de los bloques aliados al Gobierno que no estaban de acuerdo con votar la suspensión.
La suspensión de Kueider fue la opción intermedia a la que habían arribado La Libertad Avanza, el PRO y la Unión Cívica Radical (UCR) -ambos partidos con disidencias internas para plegarse a esa iniciativa-, al igual que los bloques denominados federales que, en su mayoría, tienen terminales en gobernadores.
Estos espacios resistían el pedido de expulsión de Kueider -alentado oficialmente por el peronismo- a raíz del eventual ingreso en reemplazo de Kueider de Stefanía Cora, -la segunda en la lista del Frente de Todos del 2019 por la ingresó el entrerriano- referenciada en La Cámpora.
Uno de los primeros indicios del cambio de postura en los bloques dialoguistas lo dio con un fuerte y claro discurso la senadora del PRO Guadalupe Tagliaferri (CABA) -que en todo momento tuvo la postura de expulsar a Kueider y era una de las disidentes dentro de su partido- contra el juego del oficialismo y el kirchnerismo.
«Tiene que tener en claro que los dos sectores, desde que esto sucedió, lo que están haciendo es viendo cómo especulan políticamente frente a esta situación», inició Tagliaferri y ejemplificó con el caso de José Alperovich, el senador K acusado de violación y licencia por la Cámara alta años atrás.
«Se rasgan las vestiduras, pero no lo hicieron cuando dejaron a una provincia como fue Tucumán sin representación y fingían demencia», dijo la representante porteña y remató: «Yo tengo convicciones firmes y no como cuando sopla el viento como tienen el kirchnerismo y La Libertad Avanza».
En la misma tónica fue el radicalismo que, ayer, en una reunión en el despacho del bloque del Senado, había definido que votaría la suspensión. Insistieron ante la consulta de NA que, como se especificó en el inicio, la acción de Arroyo Salgado borró de un plumazo la opción de suspensión.
«Inaudito»
El senador nacional por Entre Ríos Edgardo Kueider aseguró hoy que es «inaudito» que el Senado sesione para expulsarlo, ya que -según dijo- «el dinero no estaba» en su mochila.
«Es inaudito que el Senado quiera echarme sin escuchar mi versión de los hechos. Están vulnerando principios constitucionales como el derecho constitucional a la legítima defensa», resaltó el legislador, que se encuentra detenido en Paraguay, tras haber sido encontrado con más de 200 mil dólares en efectivo sin declarar al intentar ingresar al país.
Kueider consideró «una locura» que la Cámara de Senadores se plantee excluirlo del cuerpo.
El legislador reclamó «una mínima instancia de defensa» para contar su versión sobre lo ocurrido la semana pasada en Paraguay.
«Están diciendo que sacaron toda la plata de mi mochila y eso no es así, eso es falso, es una mentira», enfatizó el entrerriano.