Yañez había desestimado realizar la denuncia en primera instancia, cuando el juez Ercolini se contactó con ella tras revisar los chats de la exsecretaria presidencial. Ahora la exprimera dama -que vive en España- retomó la denuncia.
La exprimera dama dio marcha atrás con su primera decisión de no presentarse ante la justicia y le pidió al juez Julián Ercolini que siga la investigación en la que se analizan presuntas agresiones por parte del expresidente en la Quinta de Olivos.
Semanas atrás, el magistrado -a cargo de la causa por presunta contratación irregular de seguros del Estado- había citado a Yañez tras peritar el teléfono de la exsecretaria de Fernández, María Cantero. Alli dio cuenta de chats entre ella y Yañez, quien relataba un episodio de violencia en la Quinta de Olivos. En ese entonces, Yañez había resuelto no hacer la denuncia, cuestión que varió en las últimas horas con una presentación en la que acusa a su expareja de «terror psicológico».
En tanto, el juez avanzó con “medidas de restricción”, que incluyeron la imposibilidad del mandatario de salir del país y una orden de restricción. Según figura en la denuncia penal, Yañez aseguró que Alberto Fernández la acosa «a diario» por teléfono.
El expresidente dijo que «es todo falso». Y emitió un comunicado para decir que lo demostrará «en la Justicia».
Horas antes, el abogado penalista Juan Pablo Fioribello, que representa a la exprimera dama, había afirmado en declaraciones televisivas que Fernández le dijo que “nunca en la vida le pegó a una mujer”, al negar hechos de violencia de género contra la madre de su hijo. Ahora dio detalles del momento que Yañez confirmó la denuncia: «Estaba muy angustiada y ya no aguantaba». «Me dijo que había sufrido golpes físicos de Alberto», completó.