El Sumo Pontífice conversó con el Presidente sobre el ajuste, la distribución de los fondos para los comedores populares y la confrontación.
El Papa Francisco y Javier Milei se fueron conformes del encuentro que tuvieron en Roma. Un encuentro que tuvo un tono distendido y en los que a ambos se los vio con muchas sonrisas en las fotos.
Francisco se fue conforme porque le dijo todo lo que quería decirle a Milei, porque el diálogo fue de ida y vuelta con el Presidente argentino y porque el encuentro duró poco más de una hora. Fue la reunión más larga que tuvo con un mandatario nacional, dado que con Mauricio Macri duró 26 minutos y con Alberto Fernández alrededor de 40.
El Presidente por su parte, se fue conforme porque obtuvo respaldo papal. Es un oxígeno para Milei el apoyo del papa luego de una derrota legislativa que vino acompañada de una fuerte confrontación contra los supuestos aliados, a quienes trató de ladrones.
De alguna manera la reunión con el Sumo Pontífice es tomada como oxígeno político para Milei y eso está siendo ponderado tanto por su equipo que lo acompañó a Roma como por el propio Jefe de Estado.
El mandatario presidencial le dio un tono religioso a la reunión con Su Santidad. Hubo una parte de la hora en la que estuvieron reunidos donde se habló de religión y de su conversión al judaísmo, pese a que ayer comulgó en la basílica de San Pedro.
El tono distendido y descontracturado de la reunión llegó a tal punto de que Bergoglio le habría hecho un particular chiste a Milei, agradeciéndole por asistir al encuentro, pese a que “es medio judío”.
La reunión entre el papa Francisco y Javier Milei duró poco más de una hora. (Foto: EFE).
De los reclamos de Francisco a su visita a la Argentina
El papa le hizo tres reclamos distintos a Javier Milei. El eje central de los reclamos tuvo que ver con el ajuste que está realizando el economista libertario, del cual el papa le hizo un pedido específico: le pidió que el ajuste no caiga sobre los que menos tienen.
Las medidas que tomó Milei aceleraron la inflación de los últimos meses y esto perjudica a los más pobres, por lo que el Sumo Pontífice le pidió que tenga contemplación sobre la problemática.
En segundo lugar, y en la misma línea, se habló de la distribución de fondos para los comedores populares. Cáritas ya le había pedido al Gobierno que no se reorganice porque mientras avanza esa reorganización las iglesias no reciben la ayuda social.
También se habló de la confrontación política, la grieta, las presiones y los agravios. Francisco se refirió a la instrumentación de la pelea como método político y le pidió a Milei que fomente el diálogo con el resto de espacios.
El pedido llegó luego de que el propio Bergoglio haya perdonado al Presidente tras los agravios que le dijo en campaña electoral. “El papa es el maligno”, llegó a decir Milei en la previa a las elecciones.
Por último, el Jefe de Estado volvió a hacerle extensiva la invitación para que visite a la Argentina por primera vez desde que fue entronizado en mayo de 2013. Aparentemente, le habría confirmado que vendría al país en el segundo semestre del año.