El diputado Martín Berhongaray presentó la ley de Ética Pública en la se establecen deberes, prohibiciones e incompatibilidades a todas las personas que se desempeñan en la función pública.
“La presente iniciativa tiene como objetivo ajustar el desempeño de los funcionarios públicos y demás sujetos alcanzados a aquella ética que la provincia espera de ellos, demarcando su accionar mediante el establecimiento de un conjunto de deberes, prohibiciones e incompatibilidades”, fundamentó el diputado provincial.
El diputado detalló que conforme al artículo 1° las pautas de conducta serán aplicables a aquellos que se desempeñen en la función pública, en cualquiera de los tres Poderes del Estado Provincial y Municipal, entes descentralizados o autárquicos cualquiera que sea su forma jurídica, y con participación estatal y organizaciones de carácter público.
“El artículo 9° prevé que quienes desempeñen un alto cargo están obligados a inhibirse del conocimiento de los asuntos en que hubieran intervenido o interesen a cualquier asesoramiento o administración hubieran tenido alguna participación, su cónyuge o persona de su familia” argumentó Berhongaray.
Finalmente, por el artículo 15° se propone la creación de la Comisión Provincial de Ética Pública que funcionará en ámbito de la Cámara de Diputados con el objeto de investigar supuestos de violaciones a los deberes y al régimen de incompatibilidades éticas.
«Somos conscientes de que la sanción de una ley de ética pública no resolverá problemas del ejercicio de la función, esta tarea requerirá del diseño y ejecución de políticas orientadas a potenciar las expectativas en la mejora del nivel de vida de los ciudadanos y promoviendo el respeto por la ley», concluyó el diputado.
Fuente: El Diario.