El logro, obtenido por el Laboratorio de Biotecnología Animal de la FAUBA, permitiría mejorar la reproducción de animales de alto valor genético en la región, incluso algunos en peligro de extinción.
La Fecundación in Vitro con ICSI es una técnica de reproducción asistida que permite inseminar un óvulo mediante la microinyección en su interior de un solo espermatozoide. Una vez fecundado, el óvulo se convierte en un preembrión y se transfiere dentro del útero para que continúe su desarrollo.
Luego de cuatro años de estudios, un equipo de investigadores de la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires (FAUBA) logró trasladar con éxito a los equinos esta técnica de reproducción asistida de amplio uso en el tratamiento de personas con problemas de fertilidad.
Mediante el uso de la tecnología ICSI (en combinación con una aspiración de óvulos), a comienzos de octubre nació una potranca que llamaron Palenque Brillito, hija del famoso caballo de polo Dolfina Hulk. Ahora buscan desarrollar en América latina un servicio que hoy ofrecen sólo cinco laboratorios en el mundo, para mejorar la reproducción de animales de alto valor genético en la región.
«Palenque Brillito nació por parto natural, sin contratiempos», detalló María Belén Rodríguez, investigadora del Laboratorio de Biotecnología Animal de la FAUBA y becaria doctoral CONICET, quién llevó adelante la investigación dirigida por Daniel Salamone, investigador principal de CONICET, y junto a Andrés Gambini y otros docentes de la FAUBA.
El trabajo se realizó en asociación con la empresa El Palenque Embriones y contó con la colaboración del Laboratorio de Reproducción Animal de la UCA, dirigido por Marina Sansinena.
«Primero utilizamos las técnica de aspiración folicular, por la cual logramos extraer los óvulos de la yegua donante, guiados por una ecografía. Estos óvulos se maduraron en una incubadora y se fertilizaron en el laboratorio mediante otra técnica denominada Inyección Intracitoplasmatica del Espermatozoide (ICSI por sus siglas en inglés). Los embriones que resultaron de ese proceso fueron cultivados in vitro durante siete días y transferidos a una madre sustituta», explicó la especialista.
Una técnica revolucionaria
ICSI es una técnica de reproducción asistida que surgió en 1992 para el tratamiento de personas con problemas de fertilidad. Actualmente es la que se utiliza con mayor frecuencia en la producción de embriones in vitro. Incluso estaría superando a la fecundación in vitro. En los últimos años comenzó a trasladarse a los caballos, aunque aún existen pocos laboratorios que lograron una exitosa implementación, sólo en EE.UU. y en Italia.
«Con este nacimiento se demuestra que la técnica está puesta a punto y que los potrillos nacen con total normalidad», afirmó Rodríguez, y agregó que hasta ahora «en la Argentina se habían logrado dos potrillos con la técnica de ICSI a partir de ovarios de un frigorífico, cuya madre se desconoce. Al combinarla con la aspiración folicular podemos conocer el origen materno, lo cual la hace factible para ser aplicada comercialmente».
Según la investigadora, esta técnica ya puede utilizarse comercialmente. «Podría aplicarse para cualquier raza de caballos siempre y cuando la asociación que regula la cría de dicha raza lo permita», indicó, y consideró que los mayores demandantes de este servicio serían los criadores de caballos deportivos.
Potencial regional
El Laboratorio de Biotecnología Animal de la FAUBA, dirigido por Salamone, es pionero en el estudio de la reproducción equina en todo América latina.
En 2010 sus investigadores lograron el nacimiento del primer clon de un caballo de la Argentina y de la región. Dos años después obtuvieron el nacimiento de la primera potranca que fue previamente sexada en estadio embrionario. La técnica ICSI fue incorporada a sus estudios hace una década. Además de probarla en equinos, también realizaron estudios con bovinos, porcinos y felinos, algunos en peligro de extinción.
Según explicó Salamone, la técnica se indicó originalmente para obtener embriones de yeguas o padrillos con patologías reproductivas, pero puede utilizarse en cualquier equino, incluso fuera de la temporada reproductiva: «Es decir que ya no estaríamos restringidos a los meses de primavera-verano, sino que podrían producirse a lo largo del año», indicó.
Otros aspecto interesante de esta tecnología llevada a los caballos es su aplicación para la investigación y el desarrollo de proyectos de conservación de especies en peligro de extinción.
«Si bien lo équidos (caballos domésticos, caballos salvajes, asnos, cebras) usualmente no están asociados por el común de la gente a animales en peligro, la realidad es que existen especies y subespecies de asnos y cebras en situación crítica«, advirtió Gambini.
«La ICSI es una estrategia muy importante para producir embriones en el laboratorio y poder así preservar genética», señaló el investigador, y adelantó que en la FAUBA ya obtuvieron un financiamiento de la UBA (UBACyT) para comenzar esta línea de trabajo. «Ya estamos haciendo experimentos que incluyen hacer ICSI con semen de cebra», concluyó el experto.
Con información de SLT-FAUBA