Un soldador lucha por su vida tras haber sufrido quemaduras en el 70% de su cuerpo

Sergio Urquiza, capataz y soldador de 55 años, lucha por su vida tras haber sufrido quemaduras en el 70% de su cuerpo durante un accidente laboral ocurrido este martes en una obra de la colectora de la Ruta Nacional Nº 5 cerca de Santa Rosa. Debido a la gravedad de sus lesiones, fue trasladado este miércoles en un avión sanitario a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires para recibir atención especializada.

El siniestro ocurrió cuando Urquiza apoyó una herramienta de soldadura sobre un bidón que debía contener material no inflamable. Sin embargo, el recipiente explotó, envolviéndolo en llamas de forma inmediata. En un intento desesperado por apagarlas, corrió hacia un tambor de agua de 200 litros, aunque no logró auxiliarse por sí mismo. Fueron dos compañeros quienes, con una rápida y valiente reacción, lo rescataron volcando el contenido del tambor sobre él.

Internado inicialmente en el Hospital René Favaloro, su estado sigue siendo crítico. “Hay que esperar. Está muy grave”, compartieron sus compañeros con visible angustia.

Pero el incidente no solo generó conmoción por su gravedad, sino que también dejó al descubierto alarmantes irregularidades en la obra, llevada a cabo por la empresa. Según denuncias de trabajadores, la obra no estaba notificada ante el área de Seguridad e Higiene de la provincia, no contaba con supervisión al momento del accidente, y una gran parte del personal se encontraría trabajando en condiciones de informalidad.

La mayoría de los empleados, aunque metalúrgicos, figurarían en ANSES como albañiles encuadrados bajo el convenio de la construcción, lo que impacta directamente en sus ingresos. Además, señalaron que nunca recibieron capacitaciones en prevención de riesgos, pese a trabajar con materiales y herramientas de alta peligrosidad.

Paradójicamente, fue recién después del accidente que personal de Seguridad e Higiene apareció en el taller de la empresa, prometiendo una charla preventiva para el día siguiente. “Con el diario del lunes”, ironizó un trabajador.

Foto El Diario.