La Pampa aportó dos votos en el Senado para la aprobación de la histórica legalización del aborto. Los senadores del Frente de Todos, Norma Durango y Daniel Lovera, votaron favorablemente. El radical Juan Carlos Marino, como lo hizo dos años atrás y tal cual había anunciado la semana pasada, votó negativamente.
Marino no fundamentó su voto durante el debate. En cambio, los dos peronistas se anotaron en la lista de oradores. Durango fue la miembro informante del proyecto. Lovera dijo lo suyo: «Ni la penalización ni nuestra indiferencia evitan los abortos».
«Quienes tienen los recursos, acceden a los abortos en condiciones seguras. Y quienes no los tienen, abortan en la clandestinidad y con riesgo de vida», alegó.
«La ESI, el programa de salud sexual responsable y la ley Micaela son las herramientas por excelencia con que cuenta el país para complementar la legalización del aborto», destacó.
Por su parte, como presidenta de la Banca de la Mujer, Norma Durango aseguró al abrir el debate de este martes que “la alternativa es aborto legal o clandestino”, y sostuvo que “si este fuera un tema de varones, hace décadas sería ley”.
Conectada desde su despacho, Durango destacó que “hoy es un día de esperanza” ya que el debate sobre el aborto coincide con el del Programa de los Mil Días y el comienzo de la vacunación contra el Covid-19. “Los tres son para cuidar la vida y la salud de los argentinos. Esto es lo que llamamos justicia social”, resaltó.
La pampeana sostuvo que “una vez más tenemos la posibilidad de legislar por y para las mujeres y personas con capacidad de gestar”.
“Vengo a ocupar esta banca en nombre de las mujeres muertas por el aborto clandestino”, expresó.
La legisladora advirtió que “las mujeres van a hacerse los abortos clandestinos a los lugares más sórdidos, solas, casi siempre sin acompañamiento de sus parejas y sus familias, y nunca con el acompañamiento del Estado. Por eso el Estado debe hacerse cargo. El Estado que durante años miró para otro lado”.
Tras insistir en que “el aborto sigue sucediendo y las mujeres siguen muriendo”, Durango enfatizó que “la alternativa es aborto legal o clandestino, y si sigue siendo clandestino van a seguir muriendo mujeres”.
“Yo no estoy a favor del aborto, nunca me hice uno, pero ¿quién de nosotros está a favor de un aborto?”, se preguntó, y al detallar los puntos principales del proyecto, anunció que el Poder Ejecutivo aplicará un veto parcial a la ley, quitando el concepto de “integral” vinculado a la salud.
La senadora dijo que “si este fuera un tema de varones, hace décadas sería ley”, y agregó que a la mujer “nunca se la pone tan en el centro de la escena como en este tema”.
“Dejemos de ser hipócritas: dejemos que las mujeres decidamos sobre nuestras vidas”, subrayó, y añadió que la maternidad debe ser “un derecho y no una obligación”.
Además, citó un informe del CELS (Centro de Estudios Legales y Sociales) que indica que “1.532 mujeres afrontan causas penales por aborto en 17 provincias”. “La penalización del aborto tiene un impacto diferenciado entre las mujeres pobres y las de clase media y alta, que van a un médico, pagan el misoprostol o se hacen la práctica segura”, afirmó.
Por último, la pampeana señaló que “la ley no obliga a nadie a abortar: lo que habilita es una práctica segura”.