Luego de dos días de negociaciones, el Gobierno obtuvo este miércoles el aval de la CGT en el bono de fin de año de $5000 en dos tramos para todos los trabajadores registrados en relación de dependencia.
La medida abrirá una nueva instancia obligatoria de diálogo antes de concretarse un despido. Los empresarios deberían informar las bajas con diez días de antelación.
La CGT resolvió ayer desactivar el paro general de 36 horas con el que había amenazado para el 27 o 28 de este mes, en la antesala a la cumbre de líderes del G20.
La medida encuentra todavía reparos en los empresarios. El presidente de la Cámara Argentina de la Construcción, Gustavo Weiss, insistió ayer en que «muchas empresas no van a poder pagar el bono, ya que hay sectores con crisis muy profundas».
El pago del bono para los trabajadores del sector privado debería abonarse en dos cuotas de $2500 no remunerativos. La primera se concretaría con el sueldo de noviembre y la restante, con el de enero.
Para los empleados estatales que dependen de la Nación avanza una negociación en paralelo con Andrés Rodríguez, líder de UPCN. El bono para el sector público sería de entre $3000 y $6000.
La CGT suspendió la medida de fuerza y activará un comité que controlará las bajas laborales sector por sector. La negociación con el Gobierno abrió un inédito canal entre dos sectores antagónicos.
Fuente: La Nación.