A más de 40 días de la desaparición del Santiago Maldonado, comienzan a difundirse los primeras declaraciones de los gendarmes que participaron del operativo de desalojo contra la comunidad mapuche de la Pu Lof en Cushamen, Chubut. Uno de ellos declaró haber disparado balas de goma a un manifestante. Además consta una agresión con una piedra.
Como parte de la investigación, integrantes del escuadrón Esquel de la fuerza de seguridad se presentaron ayer para declarar ante el juez que entiende en la causa, Guido Otranto, pero además el Gobierno le acercó al magistrado un informe sobre el interrogatorio interno que elaboró el Ministerio de Seguridad.
En este documento, que ya está en manos de Otranto, figura la declaración de un gendarme, Neri Armando Robledo, que señaló haber agredido a un manifestante con una piedra. Pero también aparece la declaración de otro integrante de la fuerza, que aseguró haber disparado con balas de goma en las cercanías del río Chubut.
Afirmó, además, que actuó «en solitario«, separado del grupo, y de esta forma toma fuerza la hipótesis que planteó el propio Gobierno sobre el accionar de gendarmes «sueltos» en relación a la desaparición de Maldonado.
También, y según consignó el diario Clarín, el mismo gendarme reconoció que el disparo fue hacia el piso, que su tiro no tocó al manifestante, pero que le pasó por su costado.
Además de la declaraciones de algunos de los integrantes del escuadrón ante el juez Otranto, en Esquel, ayer se confirmó que las pericias realizadas sobre vehículos de Gendarmería que participaron en el operativo no presentaron «perfiles genéticos» de Santiago Maldonado, lo que para la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, «despeja muy fuertemente» la desaparición forzada y «abre otras hipótesis».
Por otro lado, Matías Santana, el joven mapuche de 20 años que declaró ante la Justicia haber visto cómo los gendarmes golpearon y se llevaron a Santiago Maldonado el 1° de agosto en la Pu Lof en Resistencia de Cushamen, negó ayer las versiones que indican que un agente de la fuerza le pegó un piedrazo a uno de sus compañeros. «Ningún compañero manifestó haber recibido un piedrazo», dijo.
Santana aclaró que en los incidentes con Gendarmería dentro de la Pu Lof «volaron piedras y nos tiraron tiros» pero insistió con que no hubo heridos por el impacto de una piedra: «Sólo algunos recibimos perdigones en las piernas».