Rocío Janet Passarello es una joven de 27 años que sufrió violencia de género por parte de su expareja en la ciudad de Huinca Renancó y también en Villa Valeria. Desde hace tres años decidió irse con su pequeña y su otro hijo de 11 años a vivir a Realicó para escapar de ese calvario y hoy teme que se la lleve.
Rocío se animó a contar su calvario en las redes sociales y también habló con Zonal Noticias.
«Soy Rocío, sufrí violencia de género física y psicológica de mi expareja, padre de mi hija. Hoy después de 3 años y medio de lucha, estoy tratando de seguir luchando contra este tipo, del cual pude salir ilesa, tanto yo como mi hija», expresó.
Rocío contó su odisea a Zonal Noticias: «hace tres años que vivimos en Realicó, ambas y mi otro hijo, estamos radicados acá. El padre de mi hija era funcionario público y ahora desconozco si sigue en la fuerza».
«En Huinca Renancó (donde vivió con su expareja) no tenía vida, asique comencé a venir a Realicó y ya me quedé a vivir aquí con mis hijos», relató.
«Mi hija nunca tuvo contacto con el padre, y ahora un abogado que puso él me empezó a meter presión para firmar un acuerdo. Después me llamaron un jueves para avisarme que el sábado la iba a venir a buscar, cuando mi hija ni lo conoce», expresó.
«¿Qué garantía tengo que me devuelva a mi hija sana y salva si yo se la doy a esta persona?», preguntó.
Rocío dejó en claro que tanto ella como su hija fueron víctimas de violencia de género por parte de su expareja, tanto en Villa Valeria como en Huinca Renancó.
«Tengo pruebas de lo que cuento, en un momento reventó de una trompada el vidrio estando su hija dentro del vehículo, esparciendo vidrios en todo su cuerpito teniendo 3 meses de nacida. En otra oportunidad la arrancó de mis brazos con un cuchillos tramontina, rompiéndole todas sus cositas de bebé», relató.
«Pregunto ¿qué padre deja a su hija y que padre escupe en el rostro a su propia hija con apenas dos meses?», expresó Rocío.
«Un arma en la panza»
Como parte de su calvario, la joven contó que cuando tenía seis meses de embarazo «me golpeó apuntándome con un arma en la panza, esa vez actuaron de oficio por el hecho de ser uniformado y estar con el arma reglamentaria».
«Luego comenzó ésto de las medidas de restricción, que violó en reiteradas ocasiones», relató Rocío.
«Nos fuimos hace tres años a vivir a Realicó para tener una vida mejor y alejarnos de esta persona que nos atormentó y nos sigue atormentando», destacó la joven de 27 años.
Rocío contó «que antes no hablaba por miedo, pero ahora están mis hijos (la pequeña y su hermano de 11 años de una pareja anterior), por los cuales voy a luchar».
Por último le pidió a la Justicia de La Pampa «que por favor no le permitan a esta persona llevarse a mi hija. Si bien vine a Realicó para huir de todo este hostigamiento, sé que quien pega una vez, lo vuelve a hacer porque estas personas no cambian y tengo miedo por mis hijos», concluyó.