Un grupo de vecinos de Arata se manifestó en autos y motocicletas a través de un bocinazo en repudio al hecho de violencia familiar donde una adolescente de 14 años fue goleada por su padre en la localidad de Arata.
La convocatoria se realizó por las redes sociales bajo el hashtag #NoNosCallamosMas, y partió desde la plaza céntrica para recorrer varias calles de la localidad.
El grave episodio de violencia que damnificó a una menor, se produjo el martes a la tarde. Su padre le pegó con el palo de un escobillón, molesto porque la adolescente «paseaba por el pueblo con un noviecito», indicaron fuentes policiales.
Aproximadamente a las 20 horas de esa jornada, la madre con su hija -14 años- se presentaron en la comisaría, para denunciar al golpeador.
Inmediatamente la policía, Salud Pública y Acción Social municipal trabajaron conjuntamente en la contención de la menor y su madre, y continuarán «abordando al núcleo familiar en general y a la víctima en particular».
«La menor se encontraba en una crisis de llantos y fue abordada en el centro de salud local, pero también tomó intervención el área de Acción Social municipal, donde la licencia Cerrato mantuvo una entrevista con la menor para conocer detalles que fueron informados a la Fiscalía interviniente», detallaron fuentes vinculadas con la investigación.
La fiscala Ana Laura Ruffini determinó la detención del agresor y el miércoles fue formalizado y recuperó la libertad, pero le fijaron una restricción de acercamiento hacia su hija, por lo cual se tuvo que retirar del domicilio familiar.
«Otro episodio de violencia»
En la convocatoria realizada en las redes sociales, militantes feministas aratenses se quejaron de «otro episodio de violencia terrible» que se produjo «en nuestro bello pueblo».
Desde el grupo de autoconvocados destacaron la necesidad que sociedad se comprometa y el Estado actúe rápidamente frente a la gravedad de estos casos.
Además agradecieron el compromiso y la empatía de quienes se sumaron a este bocinazo para visibilizar la problemática de la violencia de género en la localidad.
«Como militante feminista estoy convencida que este tipo de situaciones de violencia que vivimos las mujeres, deben ser repudiadas pero también deben ser un alerta para las autoridades locales para que podamos armar redes de contención y que tengamos un espacio donde podamos hablar y sentirnos más protegidas», afirmó una de las vecinas que participó de esta protesta.