Mientras que en el masculino no hay campeones desde 2015, entre las chicas sí hay una que alzó el trofeo más importante de clubes de Europa. Tras años de luchas y sacrificios por cumplir su sueño, en una semana jugará el Mundial Francia 2019 con la camiseta de la Selección argentina.
En medio del furor por el triunfo del Liverpool ante el Tottenham en la final de la Champions League, en las redes sociales varios cayeron en la cuenta de que ningún argentino formó parte de los 90 minutos de juego ni fue capaz de levantar la copa. Y así sucede desde 2015, al menos para los varones…
Hace pocas semanas, Soledad Jaimes se convirtió en la primera mujer argentina en ganar la Champions luego de que el Lyon goleara al Barcelona por 4 a 1 en la final que se jugó en Budapest.
Con la de la Selección entrenando en Ezeiza
Sus primeros pasos los dio en Nogoyá, Entre Ríos, de donde es oriunda: “Comencé jugando descalza porque vengo de familia muy humilde. Mi sueño empezó en un parquecito cuando tenía 7 años. Hasta los 13 jugué siempre así para no romper las zapatillas y poder ir. ¡Sabía que si yo usaba mis zapatillas mi mamá me mataba!”, recuerda entre risas “Sole”, la menor de siete hermanos.
Más allá de los retos ante la dificultad de poder compararle otro calzado, Jaimes rescata que siempre tuvo el apoyo de su madre –su padre falleció cuando ella era bebé- aunque admite que sus hermanos sí estuvieron un poco celosos: “Cuando vieron que era serio, que yo amaba lo que hacía y Dios me había dado un talento, todo cambió”.
«Empecé jugando descalza porque vengo de una familia muy humilde»
Así fue que Sole dejó Entre Ríos y se fue a jugar a Boca donde estuvo unos seis años. Se cruzó de vereda a River, donde solo jugó una temporada en la cual salieron campeonas y, sorpresivamente, regresó a Boca, equipo con el que jugó tres Copas Libertadores.
Foz Cataratas, su primer club en Brasil
“Ahí recibí la propuesta para irme a Brasil y me di cuenta que podía soñar más”, recuerda. El rally empezó en el Foz Cataratas, lo que describe como “dos años increíbles” de su vida. Luego jugó en el São Paulo, Santos y tuvo un paso por el Dalian Quanjian F.C. de China.
“Nunca desistí de mi sueño pensando en ayudar a mi mamá y a mis siete hermanos. Ella se bancó todo. Mi sueño era arreglar su casa y darle lo mejor que podía. Siempre que estaba triste pensaba en mi mamá y todo lo que ella pasó para criarnos, y sabía que ella quería darnos más pero no podía. Siempre estuvo mi mamá presente”, dijo.
«Cuando gané mi primer sueldo, mi sueño era arreglar la casa de mi mamá»
Y aquel sueño se hizo aún más grande cuando a comienzos de 2019 la delantera fue fichada por el Olympique Lyonnais Féminin, equipo francés con el que ganó la Liga de Francia femenina, la Copa de Francia y la UEFA Womens Champions League.
En el Lyon cumplió uno de sus anhelos
“Lo que sentí es difícil de explicar, es un sueño que tenía desde que comencé a jugar al fútbol. Mi mayor anhelo desde que empecé era jugar en Europa y gracias a Dios se dio. Después de muchas dificultades que tuve que pasar en mi vida, tuve la oportunidad de ir a parar al Lyon y jugar con las mejores del mundo. Fue un placer compartirlo, gracias a Dios conseguimos ganar los tres títulos y no hay palabras. Es una felicidad inmensa que no sé ni cómo expresarlo”, contó.
«En Francia el fútbol femenino es tratado igual que el masculino»
En ese contexto, marcó la clara diferencia en cuando a la situación que vive el futbol femenino en Argentina: “En Francia el fútbol femenino es totalmente diferente en cuanto a la estructura y es tratado igual que el masculino; el tema del dinero también es diferente, todo está mucho más cuidado”.
Antes de viajar al Mundial de Francia conoció a Lionel Messi
Con 30 años y una enorme y admirable carrera, Jaimes le dejó un mensaje a las niñas, jóvenes y mujeres que quieren jugar al fútbol: “Les diría que se acerquen no solo al fútbol sino a cualquier deporte. Todo lo que quieran en su vida lo pueden conquistar. Más allá de las críticas, porque siempre van a encontrar a una persona que les diga ‘¿y qué vas a hacer jugando al fútbol?, ahí es cuando tienen que pensar qué es lo que quieren de su vida y cuál es su sueño y seguir, porque el ‘no’ lo van a encontrar siempre y hay que ir por el ‘si’”.
Este será su primer Mundial con la Selección mayor y antes de su viaje a Francia expresó en un evento realizado por Nike: “Representar a mi país es un orgullo. Uno anhela llegar al Sub-20 y después a la mayor. Era lo único que me faltaba. Si me toca hacer un gol lo vamos a gritar mucho”.
Fuente: Minuto 1