La Justicia ordenó las primeras medidas en contra del expresidente. Tras la denuncia de la ex primera dama Fabiola Yáñe, Alberto Fernández fue imputado hoy por los delitos de lesiones graves doblemente agravadas por el vínculo y por darse en un contexto de género y amenazas coactivas.
El fiscal federal Ramiro González firmó un dictamen esta tarde en el que dispuso las primeras medidas de prueba de la causa.
El fiscal federal amplió la imputación contra Alberto Fernández en la causa penal que inició tras la denuncia formulada por Fabiola Yañez por diversos hechos vinculados a la violencia de género.
En un comienzo el expresidente sólo estaba acusado del delito de lesiones leves en reiteradas ocasiones, pero después de la declaración testimonial de la ex primera dama y el escrito presentado este martes, se determinó que los delitos imputados son: lesiones leves y graves doblemente calificadas por el vínculo y perpetradas en el marco de violencia de género con abuso de poder y de autoridad. Se le atribuyó, también, la imputación por amenazas coactivas.
Además de imputar a Alberto Fernández, el citó a declaración testimonial a María Cantero, entonces secretaria del exPresidente. Fue desde su celular peritado en la causa por presuntos hechos de corrupción investigados alrededor de los Seguros, que el juez Julián Ercolini dio con las imágenes que Yañez le envió con explícitas muestras violencia física.
Entre los testigos citados por la fiscalía, se encuentra la periodista Alicia Barrios, quien fue mencionada por la exprimera dama como alguien que estaba al tanto de las agresiones a las que ella estaba siendo sometida.
Del círculo íntimo de Yañez, el fiscal González también citó a Sofía Pacchi, que integró el staff de personal que estaba asignado a la exprimera dama y fue una de las párticipes de la fiesta de Olivos durante la cuarentena.
También deberá declarar como testigo el doctor Federico Saavedra, a quien Alberto llevó como titular de la Unidad Médica encargada de cuidar su salud y la de su familia, es decir de ella y su hijo Francisco. Yañez manifestó que el médico la vio con el ojo morado y le recetó globulitos de árnica para que la hematoma se fuera.
Durante casi cuatro horas, y como testigo, Fabiola Yañez brindó detalles ante el fiscal Ramiro González sobre los episodios de violencia que sostiene haber sufrido en manos del ex Jefe de Estado. En primer término, ratificó todo lo denunciado en el escrito de veinte páginas que el lunes había enviado desde la Embajada argentina en Madrid, bajo el patrocinio de la abogada Mariana Gallego.
En aquella presentación, Yañez se había mostrado en desacuerdo con la primera imputación que pesaba sobre Alberto Fernández, por lesiones leves. Su abogada dijo que no estaba de acuerdo con esa calificación y en función del detalle de los hechos sufridos pidió que los delitos atribuidos sean aún más graves.
Al analizar los hechos detallados durante la audiencia, el fiscal González coincidió con esa apreciación y agravó las acusaciones.
Yañez denunció que los actos de hostigamiento de los que fue víctima comenzaron años atrás, en 2016, aún antes de que su expareja fuera elegido presidente de la Nación. Es decir que también fue agredida fuera de la Quinta de Olivos.
Entre los detalles que brindó ante el fiscal, la ex primera dama habló de hechos de violencia continuados en el tiempo, de un menosprecio constante y de un «hostigamiento incluso en los últimos tiempos», mientras ella permanece en Madrid y Fernández en Buenos Aires.
En referencia a ese aspecto hizo una extensa enumeración, en la que habló de maltratos, hostigamiento, desprecio, agresiones y golpes, que «resultaban ser una constante», y que esa le habrían causado «indudables secuelas de carácter psicológico».
Por eso es que la violencia que Fabiola Yañez denuncia haber sufrido a lo largo de ocho años en diversas modalidades y circunstancias califica para un delito mayor que las lesiones leves.
La imputación formulada por el representante del Ministerio Público Fiscal, señala a Alberto Fernández como responsable de los delitos de lesiones graves «doblemente calificada por el vínculo y perpetrado en el marco de violencia de género con abuso de poder y de autoridad». No es lo único: además, se le atribuye la acusación por amenazas coactivas