La Justicia que investiga la masacre de Villa Crespo tiene pistas firmes de que la mujer habría matado a su esposo y sus dos hijos.
Fuentes policiales informaron a la agencia Noticias Argentinas que Laura Leguizamón no presentaba heridas defensivas y que Benardo Adrián Seltzer fue hallado muerto en la cama con varias heridas donde posiblemente estaba dormido.
La hermana de Leguizamón confirmó que la presunta asesina atravesaba un tratamiento psiquiátrico como consecuencia de un brote psicótico, posible equizofrenia.
De acuerdo a datos del expediente, los hijos del matrimonio, identificados como Ivo, de 13 años, e Ian, de 15, fueron sorprendidos en su habitación, donde uno de ellos murió allí, al tiempo que el otro falleció en uno de los pasillos presumiblemente mientras intentaba escapar. Ambas víctimas recibieron heridas de arma blanca en sus espaldas y tenían signos de defensa.
Además, se estableció que los crímenes ocurrieron a las 6 de este miércoles aproximadamente y en la cocina se halló «una carta escrita por alguien que no está en sus cabales».
Los cadáveres fueron encontrados por una empleada doméstica que arribó al departamento a las 13 e ingresó con sus propias llaves.
Dos puertas blindadas no estaban violentadas y no se encontraron objetos revueltos ni faltaban materiales, por lo que no se trató de un hecho de inseguridad.
Agentes de la Policía Científica todavía trabajan en el lugar de los hechos donde realizan los peritajes pertinentes con el objetivo de esclarecer los crímenes y los decesos fueron constatados por personal de SAME.
La carta que encontraron en la masacre de Villa Crespo
De acuerdo a la información que trascendió desde el seno de la investigación, la epístola habría sido escrita por Laura Leguizamón, la presunta asesina de su esposo Adrián Seltzer (53) y sus hijos, Ivo, de 12, e Ian, de 15.
En principio, la misiva fue redactada por una persona que no se encontraba en sus cabales y parte del contenido es incomprensible. Sin embargo, los peritos lograron rescatar algunas palabras sueltas y muy significativas para la causa.
“Todo mal, fue mucho. Los amo. Mal. Perverso”, son los términos legibles en la carta en cuestión. Esto sería una señal del trastorno psiquiátrico que padecía la mujer de 51 años, sospechada de haber asesinado a su familiar en el sexto piso del edificio ubicado en Aguirre 295, Villa Crespo.