La inflación fue del 3,2% en junio y acumula un 25,3 por ciento en lo que va de 2021

La inflación en la Argentina acumuló 50,2% en el último año y volvió a ubicarse entre las más altas del mundo, sin perspectivas de una baja importante en 2022.

La inflación de junio fue de 3,2% según informó el Indec, por lo que marcó una leve desaceleración respecto a mayo, cuando el índice había sido de 3,3 por ciento. De esta manera, en los últimos 12 meses la suba de precios acumulada alcanzó el 50,2% y en la primera mitad del año el IPC fue de 25,3%; de este modo, terminó de quedar desactualizada la proyección oficial de inflación para este año del 29 por ciento.

De este modo, el índice de precios estuvo en línea con lo que esperaban las consultoras privadas, que estimaban una inflación en torno del 3% para junio. Con la última cifra dada a conocer hoy por el organismo estadístico, es el tercer mes de desaceleración del ritmo de suba de precios, tras el pico de 4,8% que registró en marzo.

El Gobierno aún no modificó su proyección presupuestaria de inflación para 2021, que es de 29% con un margen de error de algunos puntos porcentuales hacia arriba. Pasados los primeros seis meses del año, la meta oficial es culminar el año con un ritmo de precios más cercano al 2% mensual que al piso de 3% que tiene en la actualidad.

Según el Indec, la suba de 3,2% en alimentos y bebidas respondió a los aumentos de Carnes y derivados; Leche, productos lácteos y huevos; Pan y cereales; Aceites, grasas y manteca; y Café, té, yerba y cacao.

En tanto, fuentes del Banco Central afirmaron que la expectativa es que la inflación continúe su proceso descendente en los próximos meses, ya que el organismo mantendrá su política de administración del tipo de cambio con miras a lograr este objetivo.

En cuanto a la política monetaria, el BCRA insiste con la esterilización de los posibles excedentes de liquidez que pudieran originarse y busca que existan instrumentos de ahorro en pesos que cubran al ahorrista de la inflación y el tipo de cambio.

Las estimaciones privadas hablan de una suba de precios anual para 2021 que superará el 48 por ciento, de acuerdo a la última entrega del relevamiento de LatinFocus entre consultoras y bancos de inversión.

Una de las más altas del Mundo

Lejos está el panorama de parecerse a la década del 80, donde la Fed de Paul Volcker subía las tasas para controlar los efectos de la tormenta del shock petrolero -y la fuerte expansión monetaria- y los países en desarrollo sufrían cuadros de muy alta inflación, o hiperinflación, como Argentina y Brasil, entre otros.

Casi 40 años después, en junio de 2021, el cuadro de inflación en los países del Grupo de los Siete ha sido el siguiente en los últimos 12 meses: Estados Unidos, 5,4%; Canadá 3,6%; Gran Bretaña 2,5%; Alemania 2,4%; Francia 1,5%, Italia 1,3% y Japón con su deflación, en este caso del -0,1%.

En el caso de otras potencias, en el último año Rusia registró una inflación del 6%, India del 5,2% y China del 1,1 por ciento.

De los países con la tasa mayor de inflación interanual, Venezuela registró el 2615% en junio -según el Observatorio Venezolano de Finanzas- Sudan el 350%, Zimbabue 194%, Líbano 119%, Surinam: 50%, Argentina: 50,2%, Irán 49,5% y Haití el 25 por ciento. En la región, sólo el régimen de Nicolás Maduro y su hiperinflación supera a la Argentina.

En Cuba, país que ocupa el centro de las miradas de buena parte del mundo en estos días, en 2020 hubo deflación del 0,3% en la canasta oficial, pero un número bastante más sombrío en los productos del mercado negro, que son los que resultan accesibles para la mayoría de la población.

Por todas estas razones, la Argentina es un caso especial, de un país que, sin atravesar una guerra civil o un conflicto humanitario, sufre uno de los mayores índices inflacionarios del mundo y sin perspectivas de mejora inmediata, ya que los consultores privados prevén que termine en el 48% este año y ronde el 40% en 2022.

Fuente: Infobae