Alta Italia: Donatto nació de 24 semanas, pesó 750 gramos y tras casi tres meses, recibió el alta

El pequeño Donatto llegó al mundo el 31 de mayo pasado y permaneció en incubadora en la Neoclínica hasta el pasado viernes. Por su buena evolución, le dieron el alta y fue recibido por una gran caravana en Alta Italia, de donde son sus padres.

El bebé que nació hace casi tres meses con 24 semanas de gestación y 750 gramos de peso fue dado de alta y pudo viajar junto a sus padres a la provincia de La Pampa. Su madre aseguró sentir una gran emoción.

Donatto Chaparro Chiappero es un bebé que nació prematuramente a las 24 semanas de gestación y con apenas 750 gramos. Tras casi tres meses de internación y gracias a un arduo trabajo de los profesionales de la salud que lo asistieron desde el primer día en Neoclínica, el niñito recibió el alta y emprendióo un viaje con destino a Alta Italia (La Pampa), donde vivirá con sus padres, Anahí Chiappero y Jonathan Chaparro.

Donatto viajó ayer 280 kilómetros desde la ciudad hasta el pueblo en el que vivirá junto a sus padres. La familia, agradecida por las muestras de cariño de la gente a través de las redes sociales.

«Fue una emoción inmensa, desde el alta de nuestro hijo hasta la recibida de familiares y amigos en el pueblo. Fue algo muy emocionante porque nos esperaron con los autos adornados y hubo una caravana. A Donatto lo pudieron conocer a través del vidrio del auto porque no puede tomar contacto con la gente por un tiempo, debido a que es muy prematuro y tiene problemas en los pulmones y no queremos que se enferme. De todos modos, la gente lo pudo conocer y le sacó fotos. Por suerte tuvimos un lindo viaje: Donatto durmió todo el tiempo”, señaló a Puntal Anahí Chiappero.

Donatto estuvo 80 días en incubadora y, al ganar peso y no presentar complicaciones, con los 2.200 gramos que pesa en la actualidad, está en condiciones de ser trasladado a la casa familiar y desde allí continuar con los controles del caso.

Anahí, mamá del pequeñito, dijo a Puntal que el proceso que les tocó vivir fue muy duro y aprovechó la oportunidad para agradecer el trato que recibieron en la institución de calle Italia.

“Fue un proceso duro como familia. Nosotros somos de La Pampa y Río Cuarto nos queda lejos. Tuvimos que viajar y acá no tenemos a nadie. De todas maneras, junto a mi marido sabíamos que teníamos que hacerlo para que nuestro hijo tuviera vida. Nos dieron tres posibilidades: Río Cuarto, Córdoba y Buenos Aires. Optamos por Río Cuarto porque es lo que tenemos más cerca. Además, habíamos tenido buenas experiencias aquí. Estuve cuatro días internada hasta que el 31 de mayo pasado nació. Después de 80 días, pudo pasar a una sala común y mañana (por hoy) le dan el alta”, repasó Chiappero.

Imagino que debe ser un logro importantísimo para ustedes llegar al alta…

-Sí, es un logro importante, maravilloso. A pesar de los contratiempos y de los altibajos que tuvimos como familia, es un logro tener a nuestro hijo con nosotros y podernos ir juntos a nuestra casa.

-¿Le sorprendió que haya nacido prematuro?

-Cuando quedé embarazada me dijeron que iba a ser un embarazo de riesgo porque soy una mamá grande, pero unos 10 días antes de internarme me hice estudios y me habían dado bien. Después de un día normal, a última hora de la noche rompí bolsa y ahí se desencadenó todo. En La Pampa me dijeron que yo no podía tener mi bebé allí porque no había vida para él, ya que no se cuenta con la infraestructura que hay acá. Por eso me recomendaron que viniera a Río Cuarto. Me dijeron que la Neoclínica era una buena institución y que iban a tratar de salvarlo y de sacarlo adelante. Gracias a Dios, eso fue lo que pasó.

¿Cómo fue todo este tiempo de internación?

-Se formó una amistad con los médicos y enfermeras. Ellos son los que sacaron adelante a nuestro hijo. Hay un equipo maravilloso. Ahora le estuvieron haciendo estudios a Donatto y la buena noticia es que, aparentemente, no le van a quedar secuelas.

La lucha por evitar secuelas

La médica neonatóloga Carolina Bustamante (MP: 27657-ME: 13760), jefa de la Unidad de Terapia Intensiva Neonatal de Neoclínica, aseguró a Puntal que, más allá de trabajar para que los bebés prematuros sobrevivan, luchan junto a todo un equipo para que los recién nacidos queden con la menor cantidad de secuelas posibles.

“Fue un proceso duro como familia. Nosotros somos de La Pampa y Río Cuarto nos queda lejos. Tuvimos que viajar y acá no tenemos a nadie. De todas maneras, junto a mi marido sabíamos que teníamos que hacerlo para que nuestro hijo tuviera vida”, aseguró la mamá de Donatto.

“Donatto nació de 24 semanas de edad gestacional y con un peso de 750 gramos. Cuando se dan este tipo de casos, los riesgos son muchos. Por eso, se inicia un trabajo con un equipo de profesionales compuesto por enfermeros, kinesiólogos, cardiólogos, especialistas en diagnóstico por imágenes, médicos de guardia, neonatólogos, oftalmólogos, entre otros, para que todo ande bien. Se trabaja para que el bebé sobreviva, pero también para que tenga la menor cantidad de secuelas posibles. La idea es que tenga una sobrevida como la de cualquier otro niño”, explicó la doctora Bustamante.

-¿Cuál fue el principal inconveniente de Donatto?

-Su principal problema fue a nivel pulmonar, por lo que requirió mucho oxígeno. De a poco se logró disminuir la dependencia y hoy se va de alta con un estado neurológico adecuado para su edad. Los pulmones vienen evolucionando bien. Ahora hay que evaluar el crecimiento y el desarrollo a largo plazo. La idea es que Donatto, como los otros niños que nacen de manera prematura, pueda tener una vida como la de cualquier otro niño. En general, las secuelas más invalidantes son las neurológicas y se apunta a eso, pero también puede haber secuelas oftalmológicas. Después del alta, el bebé va a necesitar controles de distintos especialistas, pero es una gran alegría llegar a esta instancia.

¿Estuvo siempre en incubadora?

-Sí, desde que nació hasta el pasado viernes estuvo en incubadora. En la terapia intensiva los papás nos han ayudado un montón. La idea es que con el paso de los días vayan perdiendo el miedo frente a este tipo de bebés tan chiquitos. Es necesario que compartan el mayor tiempo posible. De a poco, ellos van aprendiendo a manejarlos, hasta que al último el contacto es más fluido. Hoy en día, los prematuros tienen mayores posibilidades de salir adelante. Esto tiene que ver con los avances tecnológicos y con los tratamientos y cuidados que existen. Si bien se trata de aguantar el embarazo lo máximo posible, ya que no hay como la panza de la madre, cuando no hay otra alternativa se decide el nacimiento. En ese momento es fundamental acudir a lugares en los que los bebés puedan ser atendidos adecuadamente.

-¿Son comunes este tipo de nacimientos?

-Los nacimientos prematuros representan un 9 o un 10 por ciento del total. Ha habido un aumento de casos de prematuros, que se da cuando el bebé nace de menos de 37 semanas. En parte, el crecimiento se explica con el incremento de los tratamientos para que las mujeres queden embarazadas. A veces, cuando se consigue el objetivo, se dan embarazos complicados que no llegan a término. Al mismo tiempo, a mayor edad de la mujer o en su adolescencia, hay más factores de riesgo para tener un prematuro.

Hoy se ve una mayor postergación de la maternidad…

-Sí, las mujeres atrasan la edad por cuestiones personales o laborales. A partir de los 35 años, puede haber complicaciones. Lo mismo pasa cuando la mujer tiene menos de 16 años. Lo ideal sería congelar óvulos, pero eso tiene un elevado costo y no todos pueden acceder.

Fuente El Puntal