Se trata de uno de los pueblos más jóvenes de La Pampa, ubicado en el Departamento Rancul, a pocos kilómetros del límite con la provincia de San Luis.
El aniversario encuentra a la localidad en un contexto difícil marcado por la pandemia, por lo que no habrá festejos de ningún tipo.
En los últimos días en la localidad se detectaron 5 casos activos de Covid-19, y unas 267 personas se encuentran aisladas por ser contacto estrecho de casos positivos.
Desde el municipio pidieron a la población extremar las medidas de seguridad por algunos días días para evitar propagar el virus, por lo tanto se pide la no realización de encuentros que impliquen aglomeración de personas.
En este contexto el festejo será simbólico. Desde la municipalidad hicieron llegar un saludo a todos los habitantes de La Maruja en este complejo momento que se está viviendo.
Un poco de historia
La historia indica que en la década del ’20 llegó el ferrocarril a esas tierras, donde ya existía una pequeña población conocida como ‘Villla Barale’, que se mantiene a la vera de la ruta provincial Nº 11.
Tras la venta de los terrenos, comenzó la urbanización de La Maruja, una localidad ligada en principio a las tareas de desmonte, lo que genero la creación de varios aserraderos y una importante concentración de trabajadores y familiares de los mismos.
En 1927 se fundó en ‘Villa Barale’ la Escuela Nº 192, que cinco años después se decidió trasladar a La Maruja, una localidad que cuenta en la actualidad alrededor de 1.500 habitantes y distintas instituciones como son el Colegio Secundario y la Biblioteca Popular, que llevan el nombre ‘Modesto Caretto’, y el hospital ‘Matilde y Virginia Ghioldi’, entre otras.
Actualmente al frente del municipio se encuentra el médico Gustavo Cein.
Según el propio jefe comunal, «La Maruja es una localidad que tiene grandes extensiones agrícolas ganaderas con poco trabajo generado. Cuenta con dos plantas de silos que dejaron de funcionar hacer varios años, antes había ferias de algunas firmas que ya no funcionan más y todo eso provocó pérdidas de puestos laborales”.
A la problemática estructural del pueblo, se sumó este año el tema de la pandemia, que agudizó los problemas sociales y obligó al municipio a profundizar la ayuda a social a muchas familias de la localidad.
En este contexto, la comuna apeló a la población a extremar la prevención y dejar los festejos para cuando estén dadas las condiciones.
