Ya pasaron ocho días de la desaparición de un joven santarroseño: la familia pide que lo busquen en un campo

Ya pasaron ocho días desde la desaparición del joven Fabio Bazán (24 años) y continúa la incertidumbre sobre su paradero y lo que pudo haberle sucedido. La última persona de su familia que mantuvo contacto con él fue su abuela, María Cristina Ramos, quien alertó a la policía, preocupada porque no regresaba al domicilio. Recibió como respuesta que “primero debía radicar una denuncia por averiguación de paradero”.

“Ella lo vio por última vez el lunes 27 de marzo a la siesta, entre las 14 y 15 horas. Fabio salió de su casa y no volvió”, recordó Jorge Ramos, tío del joven.

Durante el fin de semana, la policía inició la búsqueda con efectivos de la Seccional Segunda, la División Canes, el Cuartel de Bomberos, el Grupo Especial y la Brigada de Investigaciones, pero los rastrillajes arrojaron hasta ahora resultados negativos. Ayer estuvieron trabajando detrás del relleno sanitario, por la continuación de la calle Pilcomayo y en torno a un camino vecinal.

A la búsqueda se sumaron algunos compañeros que trabajaban con Fabio en el reciclado. “Y también algunos familiares estamos dedicados activamente a la búsqueda, durante el poco tiempo que disponemos caminamos por lugares que revisa la policía, pero con mayor cuidado y tranquilidad, prestando más atención, concentrados en los detalles”, añadió Ramos.

Cada día se incrementa más la preocupación porque “el tiempo pasa y no hay novedades. En el barrio corren rumores, en la calle escuchamos distintas versiones y no queremos desechar ningún dato, pero no sabemos qué están haciendo los investigadores, además de rastrillar”, comentó Ramos. Y lamentó que “ni el fiscal ni la policía intercambian información con nosotros. Hoy vinieron a hacer una pericia a su habitación, trajeron un perro entrenado y se llevaron ropa que estaba sin lavar, suponemos que para hacer trabajar a los canes”, comentaron.

Ceferino Lucero, otro de sus tíos, reveló que los familiares han “recolectado distintas versiones que apuntan a una misma persona y a un establecimiento rural donde podrían haber llevado a Fabio. Ya lo hemos informado a la policía, porque ese campo tiene cámaras de seguridad que podrían haber registrado imágenes. Y también tenemos audios y mensajes de diversas fuentes que el fiscal debería escuchar, porque podrían servirle”, agregó.

Fuente La Arena