Realicó: juzgan a un policía por la «supuesta amenaza» con un arma de fuego a un joven

En la mañana de ayer se desarrolló la primera de dos jornadas de juicio oral y público contra un policía pampeano, a quien se lo acusa de amenazar con su arma de fuego a un joven de la localidad de Realicó, en el marco de una discusión por música alta en el marco de una fiesta de cumpleaños desarrollada en el año 2016.

El debate estuvo a cargo del juez de Audiencia subrogante Alejandro Gilardenghi (foto) con la participación del fiscal general, Armando Agüero, y la defensora oficial, Elba Pose.

El policía Jorge Ávila llegó a juicio luego de tres denuncias radicadas en su contra, en dos de las cuales resultó sobreseído.

El delito de “amenazas agravadas por el uso de arma de fuego” ocurrió en las afueras de un local de alquiler, donde se desarrollaba una fiesta de cumpleaños y hasta donde llegó el policía para pedir que bajen el volumen.

En su alegato de apertura el fiscal Agüero recordó que el hecho ocurrió en la madrugada del 23 de enero de 2016 y el Ministerio Público tomó conocimiento del mismo a través de la denuncia que radicaron dos personas, Viviana Manzano (madre de la víctima, Malco Miguel Ditz) y Susana Patricia Coronel, quien organizó la fiesta de cumpleaños para el joven Luciano Bringas. Ávila se hizo presente y realizó una amenaza con su arma reglamentaria al joven Malco Ditz.

Agüero resumió que el hecho imputado es “haber proferidos amenazas verbales exhibiendo un arma de fuego al señor Malco Miguel Ditz, por entonces de 17 años, el día 23 de enero de 2016 alrededor de las 4:50 de la madrugada en la vereda del inmueble tipo salón, denominado Los Molineros y ubicado en la intersección de las calles Remedios de Escalada y Sarmiento de la localidad de Realicó, donde se llevaba a cabo una fiesta de cumpleaños de Luciano Bringas, quien resulta ser amigo de la víctima”.

Señaló también que Susana Patricia Coronel alquiló el salón para festejar el cumpleaños y tendría permiso hasta las 6 de la madrugada para poner música. Y agregó que, antes de las 6 de la madrugada, llegó Ávila para pedir que “bajen la música”.

Siempre acorde al relato fiscal, en ese momento intervino Coronel para manifestar que tenían permiso para poner música hasta las 6 de la mañana y allí se generó una discusión.

El fiscal general relató que “en ese momento se acercó el joven Ditz y en esa circunstancia, aseguran los testigos, el señor Jorge Ávila habría sacado el arma reglamentaria, desde donde estaba, parado al lado del móvil policial, y lo habría amenazado con diferentes expresiones al señor Ditz”.

Finalmente, Agüero recordó que el uniformado pampeano llegó a juicio por una de las tres denuncias radicadas en su contra, caratulada “amenazas agravadas por el uso de arma de fuego”.


Defensa

A su turno, la defensora oficial adelantó que demostrará la inocencia de Ávila y que los hechos no ocurrieron tal como los describió la Fiscalía.

En ese contexto, Pose confirmó que el policía sí se presentó en el lugar tras la denuncia de dos vecinos por volumen alto de la música. Admitió que la presencia del policía “generó malestar” en los organizadores de la fiesta, que se dio un intercambio de palabras, pero la defensora aseguró que “en ningún momento mi defendido practicó ningún tipo de amenazas, mucho menos con el arma reglamentaria que posee por su labor”.

El policía Ávila declaró y recordó que esa noche hubo varios llamados, ya había pasado con su compañero de móvil frente al salón, habíamos pasado por enfrente, y luego de dos llamados más fue hasta el salón de fiestas con otro uniformado de apellido Villegas.

Ávila dijo que descendió del móvil mientras su compañero quedó en el patrullero y charlaba con una de las mujeres presentes en la fiesta, mientras él fue hacia el grupo de 20 personas.

El policía acusado dijo que hay una ordenanza que regula en Realicó el horario de fiestas nocturnas, aunque no aclaró el límite y tampoco lo recordó cuando le preguntó el fiscal, mientras que esa noche Coronel aludió a un permiso verbal de poner música hasta las 6 de la mañana- por parte de quienes le alquilaron el salón.

El policía realiquense aseguró que “solamente les manifesté de bajar la música”. Mientras que en ese momento los jóvenes presentes “empezaron a manifestar otros problemas que habíamos tenido, andaban mucho con el tema de las motos, sin licencia en motos grandes, seguidamente les llamábamos la atención”.

Y reiteró que “en ningún momento les mostré el arma, tenía mis manos en la cintura”, pero remarcó luego que “estaban todos alcoholizados, menos Patricia (Coronel)”.

Para la jornada de hoy se espera que declaren tres testigos del legajo, para luego pasar a los alegatos de clausura.

                                                                              Gentileza El Diario